Después de tanto tiempo confinados y aislados parece que ha llegado el buen tiempo para quedarse y nos pilla con unas ganas locas de reunirnos y disfrutar del aire libre. Y si a eso le sumamos carne asada y bebida fresca, estamos hablando de su majestad: la barbacoa.
Las barbacoas son la excusa perfecta para reunirnos con esos amigos a los que hemos echado de menos estos meses. Comer y beber juntos sin agobios de reservas imposibles en restaurantes, que estos días de reapertura bastante tienen con ponerse al día.
Reunirnos en casa a hacer una barbacoa en el jardín o en la terraza, no significa no hacerlo en condiciones de seguridad. Si algo hemos aprendido de esta pandemia es la importancia de los hábitos de higiene.
Lo seguro y creativo no está reñido con lo lúdico festivo, así que en este post os vamos a contar:
- el origen de las barbacoas,
- unos trucos de “carnicero pro” para que tus barbacoas triunfen, y
- recomendaciones para realizar una barbacoa segura y sin humos.
¿Quién hizo la primera barbacoa?
Nuestro cerebro, expuesto desde su tierna infancia a las canciones del verano, diría que fue Georgie Dann el que empuñó las primeras pinzas y avivó el fuego hasta conseguir las brasas, pero en realidad, la barbacoa es un invento tan antiguo como la cocina con fuego.
Si hay que atribuirle un origen, debería ser al precolombino pueblo taíno. Este pueblo, asentado en las islas del Caribe, utilizaba un utensilio de asado mediante un entramado de leños verdes. Ponía la carne de sus cacerías sobre ese soporte que situaba sobre las llamas de un fuego encendido dentro de un hoyo alargado. Ellos le llamaban “barbacúa”, sonora palabra que llamó la atención de los españoles que comenzaron a usarla y hoy en día ha acabado por asociarse a toda cocción de carne y verduras sobre brasas.
De ese primer hoyo con leña verde precolombino a las múltiples variedades por todo el mundo. Por supuesto, hay incluso una guerra abierta entre los que se consideran los legítimos reyes de la barbacoa. En el pelotón de cabeza se disputan el primer puesto: Argentina y sus míticos asados, Estados Unidos y sus múltiples variedades que recorren el país de norte a sur; los chinos con su char siu o cerdo a la barbacoa; el stir rying oriental con el polivalente wok, o el khorovats armenio con sus pinchos de carne de cerdo y cordero…
Es que la barbacoa no es un simple sistema de asado de carnes, pescados o verduras, alimentado con madera, carbón vegetal o gas. Es todo un acto social.
La barbacoa perfecta: la importancia de la rejilla
Un elemento clave y que parece obvio para toda buena barbacoa es que esté dotada de rejilla. Y aquí tenemos dos hechos importantes a los que nos referiremos.
El primero nos lleva hasta Uruguay, en pleno siglo XIX, cuando se aprobó una amnistía por la cual cientos de presos políticos recobraron su libertad. El hecho fue acogido con grandes festejos por todo el país, y como os imagináis, especialmente en las cárceles. Cuentan que, en la cárcel de la Colonia de Sacramento, los entonces exconvictos tiraron abajo los muros de la prisión, afanaron varios terneros a un granjero vecino y un preso tuvo la feliz idea de arrancar la puerta de reja de su celda y crear la que dicen que fue la primera barbacoa moderna.
La barbacoa moderna: la Sputnik
Otro hecho fundamental y al que debemos buena parte de la democratización de las barbacoas es el invento de la “Sputnik”.
Aquí conocemos a nuestro segundo George de referencia en lo relativo a las barbacoas.
En Estados Unidos, país donde las barbacoas de vecinos son todo un acto social, un hombre llamado George Stephen trabajaba como soldador para la compañía Weber Brothers Metal Works a principios de los años 50. George se encargaba de soldar dos medias esferas de acero con las que elaboraban boyas.
El fin de semana nuestro George descansaba organizando asados de carne en su jardín para vecinos y amigos. Pero sea porque el viento solía soplar y llenar de cenizas el asado que tan meticulosamente preparaba, sea porque al bueno de George la carne nunca le salía tan uniforme asada como él quería, se le ocurrió una idea sencilla y a la vez genial.
Utilizó una media esfera de boya que él soldaba, le añadió tres patas y la otra media esfera la utilizó como tapa. Por supuesto fue rápidamente bautizada por sus vecinos como “Sputnik” por su semejanza con el satélite soviético y pronto se hizo muy popular.
George acabaría fundando con sus jefes la compañía la Weber-Stephen Products Co., para comercializar su invento y es ahora la marca de barbacoas de referencia mundial.
Sugerencias para una barbacoa más rápida, saludable y sin humos
Como somos veteranos en esto de preparar la carne os vamos a dar una serie de consejos para que disfrutéis de las barbacoas sin acabar aborreciéndolas.
Y es que si sale el día caluroso estar cerca de un fuego puede ser acercarse al averno. Además, la preparación puede ser farragosa, la carne si no controlamos constantemente puede quedar cruda o carbonizada.
Es genial tirar de clásicos como el chorizo o las costillas, pero ya que estamos, ponemos a vuestra disposición nuestras últimas creaciones para barbacoa:
- Brocheta de ternasco rellena de espinaca, queso cheddar y bacon ahumado.
- Brocheta de ternasco rellena de espinaca, queso mozzarella, queso de cabra y miel
- Sin olvidar nuestros 11 tipos de hamburguesas rellenas Recius
9 consejos para ser el gurú de las barbacoas
Si decides encargarte tú de todo vamos a darte una serie de recomendaciones para que quedes como el gurú de las barbacoas. Puedes encargar la carne a tu carnicero de confianza, coméntale que es para una barbacoa y así te la dejará bien limpia, con las zonas de grasa y piel bien despejada.
Los 9 consejos made in Recio:
- Cuece o precocina algunos alimentos antes de ponerlos en la brasa. Eso reducirá la duración de su asado y te ayudará a controlar mejor los tiempos.
- Elige piezas pequeñas, tanto en carne como en verdura, que requieran menos tiempo de cocción. Por ejemplo, si vas a hacer patatas recuerda que sean de un tamaño medio y todas del mismo, para evitar que alguna se pueda quedar cruda y otras chamuscadas.
- Envuelve los alimentos, con papel de aluminio o si tienes la oportunidad con materiales orgánicos como hojas de plátano o de maíz.
- Da la vuelta con frecuencia a los productos sobre la parrilla. Así controlas mejor su punto, para que no lleguen a quemarse nunca.
- Utiliza pinzas o espátulas, pero guárdate de los pinchos y tenedores. Si perforas un chorizo la grasa va goteando en el fuego, el alimento pierde sustancia y jugosidad y se generan más olores y humos.
- Retira las partes carbonizadas o muy chamuscadas antes de servir.
- Además de los clásicos chorizos, longanizas, puedes animarte con verduras como tomates, cebollas, pimientos, calabacín, berenjena… Incluso frutas como la piña, el mango, la manzana o la pera toleran bien el fuego y liberan todo su sabor.
- Sazona y marina los alimentos antes de asarlos. Es fundamental para que la carne quede jugosa, se haga más deprisa y tenga un extra de sabor. El marinado puede variar, aconsejamos un líquido ácido, como el jugo de un limón y especias al gusto. La carne y las verduras se ablandan y aromatizan. Si dejáis la carne marinada el día anterior, durante esas horas de reposo absorberá todo el sabor y lo notareis en el paladar.
- Controla los tiempos según el producto: si hacéis primero las verduras y ponéis las patatas envueltas entre las brasas, la carne puede hacerse a la vez. Y podréis coméroslo todo a la vez.
La seguridad alimentaria en tu barbacoa
Como contábamos al principio si algo hemos aprendido tras la crisis del Covid-19 es la importancia de los buenos hábitos de seguridad alimentaria e higiene.
Y eso se acentúa en la preparación y celebración de una barbacoa.
Hay un factor de riesgo además y es que estamos en verano, las temperaturas son más altas y los alimentos deben respetar la cadena de frío. Sobre todo, porque esos alimentos, además, si no se asan bien se pueden llegar a consumir medio crudos. Otro factor de riesgo es que comemos al aire libre, lo tenemos más complicado para lavarnos las manos o fregar los cubiertos o utensilios.
Pero todo es cuestión de organización, os dejamos 3 recomendaciones para una barbacoa segura:
- Presta atención a la cadena de frío de todos aquellos productos que se han de transportar bajo refrigeración.
- Que no falte nuestro amigo el hidrogel, el mejor desinfectante para las manos en seco, no necesita aclarado y podemos usarlo antes de preparar los alimentos, tocar superficies sucias o infectadas, acariciar a mascotas o cambiar pañales…
- Sé muy cuidadoso o prescinde directamente de todas aquellas salsas que llevan mantequilla, mayonesas caseras o cualquier preparación que contenga huevo si está crudo o poco cocinado.
Ya no tienes excusa para no probar a hacer tu primera barbacoa o mejorarla con nuestros consejos de «carnicero pro». Seguro que tú tienes los tuyos propios, ¿nos los cuentas?
Foto de Victoria Shes en Unsplash Vincent Keiman